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CHILE.– Renato Avilés, bailarín guayaquileño, de 34 años, vive en Santiago de Chile desde el 2001. En ese año, él viajó a ese país para participar como jurado en un campeonato de danza. Tras finalizar el torneo, decidió radicarse allí definitivamente.
Asegura que ya era un artista connotado cuando arribó a Santiago. Por eso, consiguió trabajo rápidamente como docente en un instituto en donde laboró por más de 10 años enseñando baile.
Luego se dedicó a producir eventos pequeños y otras actividades. “En un momento dejé de dar clases porque me encontraba en un círculo que no podía salir. Me quedé cesante por voluntad propia, hasta encontrarme a mí mismo y tomar un rumbo. Justo en ese momento me enteré que iba a ser papá y necesitaba trabajar urgente”.
Antes, él ya había analizado la posibilidad de laborar como artista en las calles. Quería presentarse como un personaje pintoresco, coloquial. Entonces, decidió disfrazarse para dar vida a su personaje, al que llama el Estúpido y Sensual Spiderman. “Al principio, la gente me decía ridículo, búscate un trabajo normal. No les gustaba, pero yo creía en lo que estaba haciendo”, cuenta Avilés.
Tres meses después comenzó a irle mejor y al sexto mes se convirtió en un personaje conocido en las calles y avenidas de la capital chilena. Su fama subió como la espuma hace un año y medio, cuando se viralizó un video grabado en el Metro de Santiago, en el que aparece bailando ante la mirada de los pasajeros.
“Muchos famosos lo subieron a sus redes sociales, como Daddy Yankee, Marcelo Tinelli, Olga Tañón. Me llamaron de Europa para trabajar, pero solo acepté una invitación que me hicieron de México el año pasado y volví inmediatamente a Chile”.
Asegura que a su hijo Javier, de 4 años, lo ve casi todos los días y no lo puede dejar solo mucho tiempo porque se pone muy triste. Por eso todavía no ha dado el salto al Viejo Continente. En la actualidad, Avilés y su personaje son muy queridos en el país austral, pero le extraña que en Ecuador no sea conocido. Más cuando el 15 agosto pasado, ayudó a detener a un hombre que le había robado el teléfono celular a una mujer que caminaba en plena Alameda de Santiago de Chile.
El video de ese hecho se difundió masivamente en las redes sociales.
En las imágenes se observa al ‘Spiderman criollo’ persiguiendo a un hombre, corriendo a toda velocidad por una calle céntrica del barrio Nueva York. Luego, ayuda a la víctima a encarar al responsable y retenerlo.
Ahora, el Spiderman ecuatoriano se dedica más a producir videos para sus cuentas de redes sociales. Otra de sus facetas es dar presentaciones artísticas para niños en estado de vulnerabilidad. Por ejemplo, en agosto fue a Tacna para divertir a niños refugiados venezolanos.
También salió a las protestas de los últimos días. En un video se lo ve colgado de un poste, con una bandera de Chile y bailando. Debajo hay miles de personas en la Plaza Italia. “He participado en las movilizaciones, pero no de lleno pues ellos exigen sus derechos y mis videos sobrepasan el objetivo de la marcha”.
Él quiere seguir con sus mensajes en los que promueve el cuidado al ambiente y el respeto a la gente, dando un buen ejemplo con actos positivos. En uno de sus videos, Avilés baja a las orillas del río Mapocho y recoge la basura con un grupo de jóvenes