Por Michael Feldman
gringomanaba@gmail.com
Hace 100 años estalló una guerra en Europa que eventualmente involucró a la mayor parte de Europa, Rusia, Estados Unidos y Turquía.
Durante 25 años se la llamó la Gran Guerra, hasta que comenzó de nuevo con más países y cambiaron el nombre a Guerra Mundial parte I y parte II. Hoy hay nuevamente guerra en Europa y algunos dicen que este es el comienzo de la verdadera primera guerra mundial y tienen cierta razón. Señalan que en 1917 y 1934 la globalización aún no había atado al planeta en una estrecha red de comunicación, viajes y comercio. La mayoría de la humanidad no era afectada directamente. La guerra actual está tocando todos los rincones del mundo y a cada persona.
Durante los últimos 50 años las cadenas de suministros multinacionales y el libre flujo de bienes y capitales han creado una interdependencia que significa que esta vez todos vamos a sentir los efectos, incluso aquí en Ecuador. El costo de los alimentos, la energía, los medicamentos y la vivienda está aumentando en todas partes. Está surgiendo escasez de teléfonos, automóviles, equipos médicos e infraestructura electrónica, todo lo cual depende del ensamblaje de materiales y componentes de decenas de países. Rusia suministra la mitad de la energía de Europa y es un importante consumidor de camarones, plátanos y atún ecuatorianos.
La otra forma en que esta guerra es diferente es que ahora hay 15 mil millones de teléfonos inteligentes circulando entre los 8 mil millones de personas en el mundo y cada explosión, masacre y niño muerto está en su bolsillo, en su teléfono, flotando en un mar de mentiras en redes sociales, noticias falsas y desinformación. La ciberguerra comenzó hace algún tiempo. Muchos de los países combatientes tienen la capacidad de congelar los sistemas financieros, interrumpir la electricidad, las comunicaciones, las represas, el control de vuelos y las fábricas de todo el mundo con ataques cibernéticos. La semana pasada, Joe Biden anunció que los militares informáticos estadounidenses habían desactivado una botnet rusa mundial llamada “Cyclops Blink”. Las botnets son redes de computadoras privadas, posiblemente algunas hay aquí, infectadas con software malicioso y controladas por el GRU, el brazo de inteligencia del ejército ruso. Puede robar datos, borrar la memoria u organizar ataques en masa a sitios web o infraestructura crucial.
Entonces, a menos que desee que su computador se convierta en un esclavo siberiano, practique una navegación segura y recuerde apagarla por la no